viernes, 23 de diciembre de 2016

¿CONCESIONES?

EL DIARIO VASCO 23-12-2016

No es malo que las instituciones reconozcan méritos personales de la ciudadanía y los distingan con la mayor relevancia posible. Debieran hacer uso de la facultad siempre que esté de su mano esforzándose en no ser ni sectarios ni partidistas en el cometido. Estamos en temporada, como las prendas en saldo, como los planes de pensiones en bancos y cajas, como el buenismo navideño en colectivos sociales y marcas comerciales que se precien de sensibilidad a problemáticas apreciables en dosis de blandenguería excesivas, o así.
Las personas con civismo debieran aceptar sin remilgos la distinción y reconocimiento contribuyendo así a la deseable armónica relación entre gobernantes y gobernados. Eso sí, reconociendo que los actos requieren un mínimo de fasto y pomposidad y condicionando de buen grado la pública aceptación, a no verse obligados a hacer el mono en exhibiciones impúdicas, y a que las instituciones no actúen como barraca de feria lanzando alaridos lo mismo para entregar un televisor con UHF que una longaniza que lo único que tiene de cerdo es la mano de obra.

Está en ello, entre otros, el ayuntamiento donostiarra ¿No se debería evitar ese baile de candidatos al reconocimiento de mérito ciudadano y al Tambor de oro? ¿Se le ocurre a alguien pensar que ninguno de ellos ha solicitado la distinción, ni ha aceptado expresamente ser tratado de forma tan tombolesca, ni participar en competencia tan sin sentido? ¿Ha pensado alguien que las favorecidas son las instituciones que conceden el reconocimiento más que los ciudadanos que lo reciben? Fomentar el caos de propuestas populares y su publicidad contribuye al descrédito de los objetivos y de los sistemas democráticos, aunque sea yo mismo quien gobierne

viernes, 16 de diciembre de 2016

PISA

EL DIARIO VASCO 16-12-2016

         Sigo sin salir del aturdimiento por el informe PISA. No somos los mejores y nos acercamos a la cola. Ni en casa nos salen las cuentas. Esa Navarra a la que no reconocemos ningún mérito si no es bajo nuestra vasquísima tutela, nos ha superado y se deja ver entre las mejores. Nos han herido en nuestra identidad.
         Por el contrario, pocas veces hemos encajado el embate y reaccionado a la acometida con la deportividad y dignidad que lo hemos hecho. Empezando por la, entiendo que honesta, llamada del Lehendakari a la reflexión y autocrítica, siguiendo por el aluvión de opinadores, especialistas y autoridades que han mostrado su preocupación insistiendo en la necesidad de pensar y revisar las cosas, y en la de no creernos ser aquello que no hemos trabajado.
         Éramos los campeones del gasto y del coste. El puesto escolar más caro, los docentes más caros, los extras, complementos, soportes y accesorios más caros, entendíamos que los de más valor, eran los nuestros. Nadie dedica los recursos económicos que nosotros dedicamos a la salud de los ciudadanos. Sólo de mirar lo que costamos se nos curan las enfermedades que en otras comunidades necesitan tratamiento. Nuestros servicios sociales, nuestras justicias, nuestra seguridad ¿vieron el despliegue de efectos y efectivos de nuestra policía autónoma en el desalojo del nigeriano de Renteria? Nuestro gasto en eso que, incomprensiblemente, llamamos cultura, en economía, en política lingüística.

         Puede que conocer el informe nos haya resultado útil y que decidamos que en el futuro queremos ser los que mejor gastamos en lugar de los que más gastamos. Entre tanto Pisa morena, pisa con garbo, que un relicario me voy hacer con el trocito de mi capote que haya pisado tan lindo pie.

viernes, 9 de diciembre de 2016

MAL DADAS

EL DIARIO VASCO 9-12-2016

         Cuando las cosas vienen mal dadas, y suelen venir, sacamos a relucir nuestra peculiaridad, aquella que proclama que no nos quieren entender, que si no somos superiores, al menos, diferentes sí somos. Decía una radiofónica de estas, ¡cuánto abundan!, que las últimas informaciones sobre la desconfianza en el futuro carecían de perspectiva vasca. Era de las que, sin conciencia de necesidad, prefiere que las pensiones sean vascas o españolas antes que pensiones. Suponía que toda la información que no se había molestado en recabar era información interesadamente oculta, aunque ella no dudara de que el PNV seguro que la conocía. Volverá periódicamente con su opinión crítica.
         Doy gracias a Dios, estoy navideño, porque ese pedazo de camión anclado en los límites de Gipuzkoa con Navarra, haya dormido su descanso en territorios de gobierno abertzale. Quizás así tomemos conciencia de que aquí hacemos las cosas muy bien pero no siempre. No sé quién será el, o la, responsable de haber puesto en marcha la gigantesca pieza sin garantías de tránsito en todo el recorrido. Pero sí imagino las cosas que se hubieran dicho si el gobierno navarro hubiera tenido el color político al que nos habíamos acostumbrado los últimos lustros.

         Y el cabreo me arrebata cuando nuestro mundo vasco se rebela ante la retirada del premio nacional de traducción al trabajo de Santa Teresa hecho por Luis Baraizarra, por no ajustarse a las bases. La unanimidad contra el Partido Popular y Madrid es clamorosa. La obra la había presentado la Academia vasca; su presidente era prologuista de la obra descalificada, además de miembro del jurado y, para colmo, notario de profesión. Es que los vascos somos...

viernes, 2 de diciembre de 2016

ZER EGIN DEZAKEGU? EDAN?

EL DIARIO VASCO 2-12-2016

         Kilometroz, pausoz, urratsez, ibiliz eta oinez osatuxe daukagu euskara demokrazian abian jarri zenetik. Hainbeste neke eta izardik egingo al zuen mesederen bat! Ez ote gintuzten nekatuta utziko, guztiz indargabetuta, aurrera egiteko bide sailari behar den kemenez ekiteko! Agian hau zen espero genuena, hau bezalako zerbait behar genuena, benetan; zaila jakitea. Atzera, maldan behera, begiratuz neke zintzo asko ikusten dut, saio ondradu ugari, porrot burrunbatsuak, arrakasta itzelak, poz uste gabekoak, amorrazio kate luzeak. Ez dakit irudimena ahitu zaigun jada, errazkeriaren arora iritsi ez ote garen, ditugun ahulezien eta harrokeriaren artean ez ote dagoen desproportzio handiegia, baina gustatzen ez zaizkidan eta ontzat ematen diren gero eta kontu gehiago dago. Galdera gutxi eta eztabaida urritasun handixea dago. Ezintasun kritikoan mozkortuta gaude. Ezeri ezin zaio bainarik jarri intentzio txartzat, jarrera suntsikortzat eta antieuskalduntzat hartua izateko arriskurik gabe. Egon ninteke oker ere, baina...
         Gobernuak galdetu digu, euskararen eguna dela eta, zer egin dezakegun gutako bakoitzak euskararen alde? Esango nuke guztiok besteri egiten diogun galdera dela eta ez norberari. Erantzunak ere besterentzat dauzkagula, nekez norberarentzat.

         Egun horretarako, adibide bat, Donostian egiten zaizkigun proposamenak irakurri ditut. Beste proposamenen artean, lau afari, sei bazkari, hamar poteo, lau txokolate jan, bi merendola, ardo dastaketa, pintxo mintzoa eta barrikotea daudela ikusi dut. Zer egin dezakegun euskararen alde? Bistakoa, ez galdetu, bada ez bada ere, guztiaren egokitasunaz  eta... edan. Edan, datorrena datorrela. 

sábado, 26 de noviembre de 2016

MOISÉS

EL DIARIO VASCO 25-11-2016

     Cuentan cómo una bebé ha sido hallada en un contenedor. Alguien oyó algo que le pareció un sonido animal que resultó ser el llanto de una criatura, ante lo cual llamó a una patrulla de la policía autonómica que por allí pasaba y se responsabilizó del rescate. Me preguntan, y me pregunto yo, que qué es lo que sucede entre el instante desde el que se aseguran de que es una bebé y el instante en que la ertzaintza interviene. Eran segundos, o minutos que pudieron resultar letales.
      Cada vez con más frecuencia nuestras noticias enfatizan la plausible actuación de algún policía de paisano, bombero o similar que pasa por allí e interviene de forma ejemplar y heroica salvando a la persona que se ha caído al río, a las vías del tren, o se quiere tirar por la ventana. A fuerza de no explicitar, deduzco la pasividad de la ciudadanía que se limita a ser testigo incógnito, cuando no oculto, que se limita a no meterse en problemas.
     ¿Cabe preguntarse si esto que digo es así? ¿Tenemos la ratio más alta de policías y salvadores del mundo? Evitar, por favor en este caso, las dobles lecturas. ¿Las crónicas de los sucesos se redactan directamente en los gabinetes de comunicación de las policías? ¿Tan arraigada tenemos la idea de que ayudar es meterse en problemas y buscarnos líos? ¿Hemos burocratizado del todo la solidaridad humana y, como mucho, llamamos y nos vamos? Si siempre hubiera sido así ni se hubiera escrito el libro del Éxodo de la Biblia ni Moisés hubiera perdurado en nuestras memorias. Posiblemente Ane haya sido rescatada a un mundo donde no podrá conocer amor, afecto, ni gesto humano sin el preceptivo código de barras. Me gustaría que no sufriera.

viernes, 18 de noviembre de 2016

APAGUEN ESO

EL DIARIO VASCO 18-11-2016

         Era una guerra de velas. Los curas nos indicaban cuáles eran las velas que valían para la ofrenda y cuáles no, las de base tintada de rojo. Se vendían en dos tiendas diferentes. Las que valían eran las de la tienda que recompraba a la parroquia las ofrendadas para volver a venderlas. Como si fueran incombustibles. De algo tendría que valerse la tesorería de la parroquia, pero el miedo que pasaba yo porque se iban a condenar mis amigos, parientes de la otra tienda, no se me va ni con mil nuevos planes de paz y memoria. En los dolores de parto de mi nacimiento, con las angustias, se olvidaron de la vela que dejaron encendida en la mesa de otra estancia hasta que vieron fuego en ella. Un minuto más y no les cuento esta ni con patrocinio de la caja de ahorros.
          Tiempos de insuficiencia energética generalizada e interrupciones de fluido continuas; solía decir mi madre que en estos casos lanzaba un cordón con gancho, preparado al efecto, al tendido que pasaba frente a nuestra ventana y seguía planchando con la luz eléctrica de la otra suministradora del pueblo. También decía, y le creíamos, que luego el padre le pagaba un café al suministrador cuando los sábados iba al bar.
         Hasta hace nada, difícilmente hubiera sido noticia nuclear la muerte de una anciana por al incendio causado con una vela encendida por corte de suministro eléctrico. Hoy, hay que contarla, leerla, oírla y comentarla hasta la saciedad para que arraigue una conciencia de realidad percibida con dificultades. Siempre, al lado, en el intermedio publicitario, en el margen, tendremos a las instituciones, hablándonos de sus bondades normativas y, cómo no, a las compañías de energía patrocinando los informativos. Vivimos de milagro.

viernes, 11 de noviembre de 2016

ESTAR ALLÍ, ESTAR

EL DIARIO VASCO 11-11-2016


         Pocos de los que allá acudimos, al diálogo entre Saizarbitoria y  Aramburu en la librería Lagun, supongo, fuimos buscando bronca, esperando sangre o estridentes polémicas. Quizás sea por la edad de la audiencia, pero juraría que la mayoría llevábamos la intención de explorar el territorio común y las diferentes vivencias y opiniones de dos autores de referencias, expresiones, obra y estilos tan distintos. Y no pasó nada, pero nada; las diferencias no fueron letales. La diferencia que uno pudo percibir y constatar, es la de un viejo autor, un enfermo de la literatura, preocupado en explicar a los suyos con dignidad y culpabilidad el porqué de su contumacia literaria en unas circunstancias casi nunca  favorables o propicias a la creación y el de otro joven autor que actuaba con la displicencia y parquedad de profesional seguro y hecho a mostrar su trabajo en mundos en sintonía con los mercados contemporáneos. Algo parecido a la diferencia que puede haber entre vivir una historia y contarla.
         Hubo un momento de tensión, absolutamente controlada, provocado por algunas palabras de Aramburu dictadas más por el razonable prejuicio, pero prejuicio, que por los datos. Se resolvió sin fortuna y bien merece una clarificación a la que se puede proceder en cualquier momento y con distintos agentes, más en estos tiempos en los que tenemos a gala ser los campeones de la convivencia y del entendimiento entre distintas sensibilidades.

         Por cierto, Saizarbitoria departió en la puerta de la librería el momento con algunos amigos, la hija de un asesinado y el propio librero entre ellos. Aramburu, por su lado, firmó ejemplares a petición de algunos asistentes.

sábado, 5 de noviembre de 2016

PÍO, PÍO

EL DIARIO VASO 4-11-2016

         Resulta exagerado decir que Pío Baroja haya sido, alguna vez,  presa del olvido. Proscrito y ocultado en ciertos estamentos puede que sí. Pasa que entre nosotros los hay que en su exacerbamientos nacionalistas y furores lingüísticos pueden negarle su condición de escritor vasco o reconocerle la misma altura literaria que a un don fraile autor en euskera de línea y media de una carta. Son cada vez menos. A la inversa, igual de catetos, los hay que aprovechando la ventaja que les conceden los reaccionarios se creen la gente más abierta, liberal y progresista del mundo por el mero hecho de citar a don Pío, de homenajearlo o no leer media línea en euskera.
         Estos suelen ser mis temores cada vez que alguien propone homenajear o recordar a cualquier personaje de la cultura. No comparto esa obligación que nos suele acuciar, más a las instituciones, de recordar en números redondos contados a partir del nacimiento, muerte, primera comunión, o parecido, del personaje, a pesar de que estos no debieran ser igual motivo para celebrarlo, ni guarden relación con la obra. Estas celebraciones tiene entidad si consiguen aportar algo nuevo a lo recordado y celebrado.
         Me ha sorprendido la repercusión de la celebración de los sesenta años de la muerte de Pío Baroja, más allá del forro panadero. Habrá quedado, como se dice, el legado de la celebración. Propongo, a modo de taller, que se escojan veinte o cuarenta personas que vayan intentando imaginar lo que a Baroja le parecerían este tipo de celebraciones, y que cada una de ellas componga esa opinión con otras veinte o cuarenta frases literales extraídas de su obra literaria. Otro homenaje.

.

viernes, 28 de octubre de 2016

CARETO

EL DIARIO VASCO 28-10-2016

         Y digo que no, que muy amable, muy agradecido, pero que no me interesa. Por lo general la negativa a secas no suele surtir efectos y provoca mayor insistencia. Que no, que no conozco los detalles pero que no me interesa. Entran directamente en crisis la educación y buenas maneras. Que si insiste y no se despide tendré que cortar y colgar directamente, sin más. Y hay veces que acabo colgando brutalmente. Me queda mala conciencia. Quien estaba al otro lado del teléfono se estaba ganando su pan, en duro oficio, y lo he plantado con un palmo de narices, ¿tengo que sentirme responsable de una hipotética floja evaluación profesional de  quien me hablaba? No es justo, no es justo para nadie.
         Peor es cuando preguntan por alguien de la familia. Que si está, que si no está. Que si la novia, que si el novio. Que si en la otra casa. ¡qué no! Que ni se le ocurra llamar, porque no estará, que si los viernes gimnasia, que el martes pinchopote, que a otra hora, que el chiquiteo de esta semana. Y voy soltando pormenores de la vida íntima y familiar sin saber a santo de qué ni a quien ¿para qué tendré que dar explicaciones? Y todo porque en casa nadie hay en ese momento que tenga entre cero y cien años para contestar a la encuesta y porque mis padres nos enseñaron a no mentir nunca.

         Y el colmo resulta cuando me preguntan y creo que es por la familia, con lo cual presiento que algo nos ha pasado sin que yo me entere. A la enésima caigo con que tiene relación con la formación de gobierno y todas esas derivadas tragicómicas que no consiguen hundir del todo al país. Oiga, usted que me lee ¿tengo careto de comité federal u órgano análogo? Faborez!

viernes, 21 de octubre de 2016

PLANETA ETA BIOK

EL DIARIO VASCO 21-10-2016


        Egun horretan euskarazko irrati publikoarekin gosaldu nuen. Euskadi literatura sariak izendatzen hasitako astea zen edo, jende gaiztoaren esanera kimikako saridun kalimotxoa asmatu zuena izenda zezaketen bezala, Bob Dylan literaturako Nobel saridun izendatu zuten astea. Bezperako gauean Dolores Redondo aldarrikatu zuten nobelako Planeta sariaren irabazle. Arduraz prestatutako programa izan zen, ahots eta esan txukun eta jatorrekin. Adi jardun nuen entzuten. Euskararen munduak beste askotan bezala sakoneko tristuraz utzi ninduen. Zeren eta erdal munduez harrokeriaz eta desafektu jasangaitzarekin aritzea ala irizpiderik gabeko morrontzan aritzea ezin ditugu berezi. Eta bien tartean aritzeko mila bide, mila modu, askoz ere egokiagoak daudenik ezin dugu aitortu.
        Nekez irabazten du Planetaren oihartzuna bezalakoa duen saririk etxeko idazle batek, baina zail egiten zaigu etxekotasuna aitortzea inolako oharrik gabe, eta etxekoa da. Idazle honen ia produkzio osoa, euskaraz argitaratua egonik ere, hogeita hamar hizkuntzetara itzulia zegoela esatea izan zen hurbileneko baieztapena. Eta Baztan bailaraz aritu ziren, damu bezala, lotsaz bezala, han txantxigorriaren sektorea berriro jaio edo piztu ez balitz bezala, udaberrian datorren pelikula borondatez kanpokoa izango balitz bezala. Beti geratuko zaizkigula trilogiak ezkutatzen dituen parajeak esanaz eman zuten errematea.
       Planeta saria irabazi duen donostiar nafar idazlearen trilogia osoa euskaraz argitaratua dago. Lehen nobelak ia bost mila ale saldu ditu. Ez dut irakurri eta ez dut esango irakurriko ez dudanik, baina inoiz aipurik egiten badiot barkazio doinurik gabeko begirunez egingo dut, euskara publikoak ohi ez bezala. 

viernes, 14 de octubre de 2016

MAS PERDONES

EL DIARIO VASCO 14-10-2016

        Este mundo nuestro tiene un alma y un ser tan mediáticos, lo real es sólo ficción y la ficción lo único real, que cobra mucho más valor el pedir perdón que el asumir las responsabilidades y las consecuencias de nuestros actos, sin distinción entre públicos, privados e intimísimos. Seguimos siendo tan espeluznantemente católicos que la penitencia es la exigencia en lugar de la reparación y restitución. Sólo así se explica esa tolerancia para quienes nos gobiernan, sin ningún rubor por su parte ni sobresalto por la nuestra, habiendo pedido perdón mil y una veces pero sin el menor amago de asumir responsabilidades por el mismo motivo. Suelen nuestros niños aprender a decir perdón a modo de conjuro o sortilegio, sin conciencia de enmendar, pero dispuestos a aprovechar sus mágicos efectos.
        Asombra el comunicado disculpatorio de los dos atletas sexuales del glorioso Eibar. Dicen lamentar profundamente una indiscreción de la que no son responsables y la difusión del vídeo que puede dañar su imagen, la de ellos claro, y especialmente la del club cuyos colores defienden; y ofender a sus aficionados, de ellos claro, y a la ciudad de Eibar, en general. Afirman ser conscientes de que los futbolistas profesionales deben dar ejemplo en todos los ámbitos, especialmente a los niños ¡Glup!
       Aunque clasifiquemos el comunicado en la lista de peticiones de perdón que no merecen crédito, lo piden por dañar la imagen del Eibar y su ciudad, tendremos que terminar agradeciendo que consideren persona a la mujer agraviada por aquello de que, de paso, quieren igualmente disculparse por el daño que pueda suponer la divulgación del vídeo a la imagen de la tercera persona involucrada en el mismo. Todo un avance.

viernes, 7 de octubre de 2016

SIMPATÍAS

EL DIARIO VASCO 7-10-2016

         Comprado y pagado un cajón, me enviaron a la planta de recogidas. Comenzó la espera, cambio de turno de los empleados. Alguien habló de un hombre de camisa de rayas, éramos dos. Falsa alarma, aparte de que no había ninguna persona con camisa que no fuera de rayas. Continuó la espera. El otro, la otra camisa de rayas, empezó a hablarme de diversas cosas, de su experiencia en el extranjero, de cómo dilucidaban las cosas y otras menudencias, ninguna de ellas sorprendente. Empezó a entrarme el miedo de que aquel señor me iba a meter en un lío. Le asentía en todo, o no le llevaba la contraria en nada, y le dirigía palabras de aparente resignación. Acabando su recorrido dialéctico, cuando barajaba la posibilidad de rogarle que se callara o decirle directamente que no, remató su discurso. Me dijo que donde pasaran los socialistas no crecía la hierba. Balbuceé tímidamente que yo era uno de… y llegó el cajón salvador. Salí zumbando.

         Frecuento un café estos días. Entre los habituales, indefectiblemente, una señora departe con señores que suelen coincidir. En días de proximidad oigo cuanto suelta la dicharachera, que no evita la actualidad política. Por si acaso me sumerjo en el café y me tapo la cara con la cucharilla. Pero hace un par de días llegó mi turno y fui una víctima más de la simpatía. Me abordó y, sin otro saludo, me dijo que ella era nacionalista. Para no ser el típico antipático que contesta con monosílabos, y con ánimo de agradar, tuve el infortunio de preguntarle que a ver si así se encontraba bien, en cuyo caso... Me interrumpió airada, diciendo que, que raro, que todos salíamos por la misma. De verdad que lo que pretendía decirle era que muy bien. 

viernes, 30 de septiembre de 2016

'TUG OF WAR'

EL DIARIO VASCO 30-9-2016

           El cementerio de Nuarbe no tenía apoyo municipal e iba a cumplir un año acogiendo los restos del fusilado Otaegi. A petición del cura, el DV de entonces me coló una información discretamente ambigua con objeto de recabar algún dinerillo al camposanto. El todavía alcalde franquista me pilló en la calle en la antevíspera del aniversario del fusilamiento y ante una tercera persona me dijo: ¡Este chico es idiota, vierte todas sus iras contra el ayuntamiento de Azpeitia! Al día siguiente, domingo, dimitió y se fue a los toros de San Mateo en Logroño.
        A primeros de mes y en el apartado “Afueras” del Tratado de Paz, programa de la Capitalidad Europea, el artista Juan Luis Moraza, al reclamo de la proyección de la sokatira en el pueblo, ha realizado la performance Tug Of War culminada con una preceptiva sardinada. El responsable de Tratado de Paz, que ha situado a Nuarbe entre Tolosa y Azpeitia -todo lugar de la tierra se sitúa entre Tolosa y cualquier punto geográfico- ha dicho que la sokatira se convierte en una escenificación de un conflicto territorial, esencializado en una representación deportiva, y que minimiza la violencia al transformarla en un catalizador de la convivencia. Y se ha quedado tan ancho, inducéndonos a la reflexión y al pensamiento crítico.
         Allá siguen, en tierras ya municipales los restos del fusilado. Hoy un niño o niña de Nuarbe vive a siete kilómetros de un diccionario de inglés o de un libro de relatos de Iban Zaldua en estantería pública. Caso de que quisiera acceder a ellos debería renunciar a su transporte escolar. Todo funciona mejor, incluso la duda sobre la conciencia crítica del arte contemporáneo. 

viernes, 23 de septiembre de 2016

ORADORES

EL DIARIO VASCO 23-9-2016

         Estaba presa la libertad y, por tanto, prohibido votar. Y aunque cueste creerlo, mucha gente, pero mucha, vivía tan tranquila y sin que ello le importara demasiado. Por no hacer nada, ni criticaban. Tras años de anhelos, trabajo y dura lucha, llegó la libertad, las libertades. Pudimos votar. Descubrimos que el hecho de votar conlleva más incompatibilidades de lo que creíamos con los apáticos. Ya desde la primera se volvieron activos críticos con lo que parecía el primer fundamento de la democracia. Decían preferir aquello de mejor todos a una que tener que elegir entre opciones que ellos consideraban iguales, todos lo mismo. Siempre ha habido gente incapacitada para digerir la pluralidad, gente aferrada al discurso más tabernario.
         Ese discurso sobre el aburrimiento y pesadez de las campañas, esa perorata que no habla más que de ladrones y aprovechados, esa cantinela que repica que las elecciones son un castigo, ese miedo a la libertad que fuma, bebe y engorda entre nosotros, esa pereza para pensar, para decidir, ese resentimiento, esa envidia, esa falta de respeto, esa ranciedad, esa mala educación, ese gamberrismo disfrazado de rebeldía, esos oficios, esas misas, esos ritos…

         Es que no es posible que más allá de los más que razonables argumentos de la decepción y del aburrimiento se muestre tamaña animadversión al hecho democrático por parte de gente que lleva siglos con la misma misa, el mismo sermón, la misma parábola, la misma rutina. Si no es porque no les gusta la democracia tiene que ser porque no se enteran. Malas cosas ambas.

viernes, 16 de septiembre de 2016

GORABIDETAN

EL DIARIO VASCO 16-9-2016

         Han zihoan, auto atzea kargatu eta bolantean aurrez egin behar eta egin gabe zeuzkanak eginaz: gerrikoa lotu, antioju beltzak jantzi, belarriko minik gutxiena eragingo zion emisora harrapatu, eta garaiz egin ezean arriskutsu bihurtzen diren horiek guztiak eginaz. Atzeko jarlekura zerbaiti heltzera edo eustera beso bat luzatzea besterik ez zuen falta. Industria poligono bat, larunbata, eta ia ez jenderik eta inolako ibilgailurik, beraz ez eta arriskurik ere, salbu eta berak, nahaste ikaragarriren batean, bazterren bat jo edo bidetik kanporakoa hartzen ez bazuen; hala ere abiada hartan...
         Denak zuzen, asteburu ederrak eragin ohi duen lasaitasun horrekin zihoan, ez bolantean zakur amorratu edo otso ero bihurtzen diren horiek bezala. Tupustean eta muturren aurrean hiru neskatilak gurutzatu zioten errotonda erdiz erdi. Ikaratu egin zen eta hala ere aukerarik onena egiteko kapaz izan zen, frenatu eta isil isilik iraun neska izutuok bide bazterrera, salbazio eremura iristen ziren arte. Aurrera egin zezakeen deskalabru bat eraginaz, baina garaiz jabetu zen. Metroak lehenago, bozinaka eta orroaz hasi zitekeen neskei abisu emanaz, paseak pasa arrazoi duela adieraztea besterik nahi izaten ez dutenek bezala.

         Ikaraz egin zuten korri bi neskatok, hirugarrenak “eta zer?” aurpegia melena artean jarri eta, bere gorabide hasiberriko gaztetasun guztiak zut, desafioz bezala begira, lasai arraio jarraitu zituen bere pausoak. Haren kideei deitzea pentsatu zuen eta harako hari burukoek urdailera jotzen ziotenean ere berak gizon eta laguntzaile jarraituko zuen abisua ematea pentsatu zuen. Baina hori noiz gertatuko ote da? Eta, bera, non egongo ote da gertatzen denean, haize guztiak otzandutakoan?

sábado, 10 de septiembre de 2016

Y LIBRES

EL DIARIO VASCO 9-9-2016

         El candidato y otras gentes estaban enzarzados en una discusión sobre quien era nación antes, España o Euskadi o viceversa. Les mostré mi extrañeza por esa preocupación. Me mandaron a estudiar, a documentarme, o sea, a freír espárragos y hubo quien me comparó con alemanes indiferentes a los brotes nazis. Es esta triste vida.
Y en eso llegó el paso de la Vuelta a España por San Sebastián. Con la expectación de quien el ciclismo es el deporte de sus entrañas y con ojos con prisma de que Perurena es la firma, la única firma, salí a la calle. Fue larga la espera. Era la calle San Martín repleta de gente en las dos orillas. Pasaron los coches, las motos, banderines, rótulos, incluso gente que le gusta que la vean. Los espectadores rezumábamos un punto de felicidad. Los había curiosos, nostálgicos, festivos… Al contraluz, las figuras de los ciclistas se me hacían grandes según se me aproximaban, apenas se les distinguían los colores hasta que no estaban a la altura de uno, aparte de que los negros están de moda. Pasaron. Pasaron con ese ruido, fluido ruido del pedaleo de un pelotón, creo que es lo más bonito del ciclismo. Me colmé de emoción, aquella emoción infantil. ¡Qué viejo estoy! Y, aunque manco, aplaudí a rabiar hasta a los coches de los mecánicos. Éramos gentes que libremente aplaudíamos a unos deportistas que pudieron pasar, al fin, libres entre gentes libres, como casi nunca lo habían hecho. El candidato, bloqueado en sus trece, seguía en las redes sociales y subió una foto que decía: La Vuelta a España pasando por San Sebastián (España).

         Me apena mucho que gente que, libre al fin, ha perdido la capacidad de identificar la libertad, de disfrutarla y de llamarla por su nombre.

viernes, 2 de septiembre de 2016

PEDAGOGIAS

EL DIARIOVASCO 2-9-2016

         Lo más honrado sería hacer un uso pedagógico de las conmemoraciones en torno al asalto, violación, incendio y posterior reconstrucción de San Sebastián. Independientemente de que, hoy, ser honrado no parece una obligación, no por lo menos tanto como esos aurreskus, ezpatadantzas y misas con txistularis que prodigan no menos que en cualquier otro tiempo sin libertades. Pero esto es un detalle sin demasiada importancia en comparación a ese espectáculo, mascarada, que protagonizan esos machotes con libido artillero que se exhiben como un desviado cualquiera. Les da lo mismo conmemorar lo que sea, la toma, la fuga, el trece, el treinta y uno, la muerte que la resurrección, con tal de desfilar con marcialidad apática y desidiosa, disparar, provocar explosiones, estruendos. Me parecen ridículos adultos que juegan infantilmente a guardias y ladrones, a indios y vaqueros, a soldados polvorosos, pero muy polvorosos.

         No soy quién para censurarles su afición ni para negar legitimidad a sus gustos y prácticas. Cada cual se divierte como quiere, siempre que no incordie al resto. Pero entender, por ejemplo, que esa forma de hacer el gamba, con petardos y cohetes, es recordar a aquellos que dieron su vida por Donostia me parece una agresión cívica y un desprecio infinito al rigor histórico. Que se diviertan como quieran, incluso, así como lo hacen, pero que dejen de llamar a eso reconstrucción, por respeto a la memoria de quienes decidieron levantar la ciudad, y a quienes exigimos que se les aplique con rigor extremo la ordenanza de ruidos, y también a los que claman que se les recluya en la unidad de sonados. También merecen respeto.

domingo, 28 de agosto de 2016

ELOGIO

EL DIARIO VASCO 26-8-2016

         Le titularon la entrevista diciendo que a los políticos les toleramos cosas que en una empresa privada no les permitirían. Es un intelectual serio y que no se prodiga en tonterías a pesar de que, esta vez y a mi entender, tenía el punto crítico un poco chato, cosa que le hizo decir algo con que muchísima gente está completamente acuerdo. Se me fue el recuerdo a aquellos tiempos en que uno iba a cualquier ventanilla o mostrador de administración pública con un miedo general e indefinido a no se sabe qué, a poner a remojo su problema en un océano de ineficacia. Hoy, nos arrimamos a esos lugares, con la seguridad de nuestros derechos y con altas probabilidades de encontrarnos con gente que nos atienda amable y gentilmente. Desde luego que la probabilidad es más alta que en esas empresas privadas llamadas bancos o cajas, donde se va a ingresar diez euros, cancelar ese no sé qué, o modificar un dato, y se sale patrocinado por un problema que no se tenía, y que antiguamente se solucionaba fácilmente, pero que hoy no deja de perseguirle a uno a perpetuidad.

         Me pregunto yo cuantos cuñados, sobrinos, amigos y gente ineficiente rondará en las esferas privadas de las empresas sin evaluación de capacidad o aptitud. Y, no es que me lo pregunte, estoy seguro de que la corrupción en la política pública sería imposible sin corrupción en empresa privada ¿Quién, qué, para qué y para quién corrompe? Nunca censuraría a un joven, a un amigo, un familiar, diciéndole que lo que hace no se lo consentirían en la empresa privada. Ocurre que en todos nuestros ámbitos los sinvergüenzas empiezan a ser mayoría y tenemos que empezar a frenar el elogio incontrolado.

domingo, 21 de agosto de 2016

FONDEROS

EL DIARIO VASCO 18-8-2016


         Christian Andersen describe la parada del tren en Olazagutia como algo, diría yo, ciertamente espantoso. Un frio, similar al que hubiera podido padecer en una travesía entre los montes de Noruega y Suecia. Sin embargo canta excelencias sobre aquel pueblo con aspecto de ciudad, con casas bien construidas y grandes soportales; San Sebastián, fondas limpias y elegantes. Sigue contando cómo en Madrid hubieron de pagar un precio muy alto por el visado de sus pasaportes y cómo en Irún se les volvió a exigir un nuevo tributo, prueba clara de que algo había que sufrir para no encontrar todo paradisíaco en España. Está claro que Andersen, allá por 1862, desconocía el concepto de tasa turística.
         Parece que es objetivo de nuestras instituciones involucrar a los turistas en los costes de la ciudad y del territorio que disfrutan a través de esa media moneda, dos monedas, o similar, que se cobraría por cama, y puedan comprobar así que el paraíso que les ofrecemos tampoco es completo. Hasta el momento pocas voces han discrepado en público de la idea. Cabría resaltar la aceptación matizada de alguna asociación de empresarios hosteleros que se muestra partidaria de reinvertir lo recaudado en la promoción turística.

         Me resulta bastante molesta esa idea generalizada de que lo que las instituciones pretenden, indefectiblemente, es recaudar; casi tan molesta como la de que quien paga es el único titular de derechos. ¿Pueden los empresarios de hostelería, u otros, explicitar su inversión en la promoción? ¿pueden las instituciones envidar diciendo que invertirán en promoción una cantidad proporcional, o igual, a la inversión del sector?

martes, 16 de agosto de 2016

¿FAVOR?

EL DIARIO VASCO 12-8-2016


         Difícilmente puedo soportar un partido de futbol íntegro. Puestos a ello puedo soportar, de principio a fin y con ánimo combativo, cualquier partido de la Real por malo que este sea. Hace años que siempre que me pongo toca malo. ¡Ah! Y eso sí, que no me lleven al campo, en el sofá de casa plácidamente. No puedo con las unanimidades estruendosas, a la primera me hago del árbitro y de sus sentidas madre y familia. Por tanto, nadie piense que no soy opinión autorizada ni desconocedor de la regla del fuera de juego, la conozco desde que la llamábamos “hor zai”.
         Me cuesta más entender el galimatías de la financiación de la obra del estadio de Anoeta, esa propiedad pública, tan digna como exclusivamente usada, en su práctica totalidad, por la Real de nuestros dolores. De todas las propuestas habidas hasta ahora, constructivas y financieras, la última, la que está pendiente de pequeños trámites y retoques estilísticos, es la más simpática, hasta llega a prestar dinero a una sociedad de capital municipal. ¡Increíble! Cómo ha cambiado el futbol, y nosotros, que nos lo creemos. Cuando a la opinión pública nos da por creer en lugar de entender, se adueña de nosotros ese prepotente que tanto me irrita y me cuesta soportar.

         Pues sí, a ese extremo hemos llegado, hasta el punto de que uno de los exégetas de ese acuerdo de convenio llega a afirmar que con el dinero que la Real destinará podría levantar un campo propio en cualquier solar y, siendo como es el único usuario factible de la operación, dejar Anoeta convertido en una casa de cultura con un estadio abandonado en su patio trasero. Ruego que los prepotentes desistan de hacernos favores.

sábado, 6 de agosto de 2016

DESAFIO

EL DIARIO VASCO 5-8-2016

            Este diario titulaba, hace días, que leyendas del deporte vasco inauguraban una exposición en el Museo de San Telmo. No sé por qué, me dio por pensar que tenía que estar entre ellos Txomin Perurena, ese pícaro ilustrador el Tour del que disfrutamos en nuestro periódico. Pero no, no estaba y me di cuenta de que la cosa iba por otros derroteros, que quien tituló la noticia incurrió en esa rutina mental del que casi ningún vasco empezamos a estar libres.
            La noticia se refería a una exposición que se quiere inspirar más en el desafío, el reto y la apuesta que en la discutible especificidad vasca de las actividades deportivas representadas. También supongo que los comisarios de la exposición no han podido librarse de la rutina que he citado. Acudí a verla en pareja y ante mi falta de entusiasmo final fue mi mujer quien me dio la explicación. Nosotros, ella y yo, habíamos crecido en esos ambientes, por lo que es muy difícil presentarnos algo que nos sorprenda, motivo por el que a nadie me atrevería a desaconsejar la visita.
            La rutina impera. Aquello que, en rigor, se llamó deporte rural ha pasado a llamarse, en castellano y en euskera, herri kirolak, incluso alguno se ha atrevido a llamarlo euskal kirolak, y ahí sigue, confundiéndonos, olvidándonos de gallegos o cántabros o no incluyendo en la relación de deportes vascos especialidades que se practicaban y practican habitualmente calzados o mecanizados y sin que necesariamente haya apuestas.

            Ahora que son las fechas, no me explico por qué las distintas modalidades del juego de la pelota vasca no son un deporte olímpico ni hay un clamor popular, político, que lo exija.

viernes, 29 de julio de 2016

ZABALAGA

EL DIARIO VASCO 29-7-2016

         No deberíamos escatimar un céntimo en crear un premio con fuerte dotación económica para quien, político, ciudadano preclaro o de a pie, fuera capaz de plantearnos en términos razonables y razonados la proporción justa que deberían tener el gasto social, el cultural y otros. Me da que hace bastante que perdimos el juicio y estamos lejos de recuperarlo, en perjuicio, claro, de la cultura y del ámbito de las prestaciones sociales.
         En ese punto ha simulado querer colocar su negativa al acuerdo de Chillida-leku nuestra diputación. ¡Horror! No se puede explicar peor. El anuncio foral más parecía la expresión pacata y fugitiva de un tumultuoso bailongo liderado por un coro de Santageda, al estilo de esos mix de bertso, aurresku y flamenco que últimamente nos ha dado por entender que son la máxima expresión de la cultura y la diversidad. Es legítimo concluir que si el gasto estratégico en lo social y en desarrollo económico se hace con parejo criterio nos iremos a pique en la próxima tempestad.
            Ahora -muy al estilo- supongo una fina, callada e invisible lluvia de suciedad que poco a poco irá enfangando el nombre de los Chiillida. Aquí se descalifica y se ponen en marcha infamias soterradas, lo de debatir y discutir es un camelo, transformado en espectáculo, que solo unos ingenuos y lelos como nosotros queremos creer. Cuando así conviene se infla el censo de los enemigos del país y ya está.

            En su día no gustaba nada a nuestros representantes el Guernica de Picasso, hoy lo reclaman como propiedad exclusiva. Les alabo el gusto, pero quizás sea tarde. 

viernes, 22 de julio de 2016

JOSETXO

EL DIARIO VASCO 22-7-2016

            He de reconocer que, a la hora de ponderar el listón del sufrimiento me resulta más molesta que creíble la expresión “es duro tener que vivir con escolta”. No todas las personas obligadas a no separarse de sus guardaespaldas y obligadas a vivir protegidas tienen la misma capacidad de relatar sus vivencias. El hecho de tener que vivir de esa manera tan anómala debiera de ser suficiente para certificar las penalidades de una persona escoltada, pero los detalles y pormenores de las vivencias de esas personas merece más crédito que la propia retórica, por muy políticamente correcta que esta sea.
            Casi la cuarta parte de mi vida la he vivido escoltado y nunca dije esa frase, no me lo parecía. Una persona escoltada que vive inmersa en el pánico, que tiene un miedo cerval, no se queja porque la escolten. Todo lo contrario, es incapaz de vivir sin ellos. Su drama consiste en que para ser persona, para sobrevivir, para disponer de libertad, para hablar con serenidad, para todo, necesita ir guarecido por dos personas armadas.

            La relación con esas personas armadas es equívoca. Es difícil determinar cuándo es cada cual sirviente o patrón. Es cruel tener que separar lo humano de lo profesional. Las vidas en juego son las de todos. En tiempos en los que, para recordar el miedo, el mucho, pero que mucho miedo, que compartimos, sin que nunca se borrara la sonrisa de su cara, en tiempos en los que podíamos haber sido solo amigos ha caído derrotado por la enfermedad Josetxo, uno de esos armados a quienes les debo gratitud, que me protegió para poder seguir siendo persona. Eskerrik asko guztioi.

viernes, 15 de julio de 2016

JUVENTUDES

EL DIARIO VASCO 15-7-2016

            Ahora que ya somos pobres, o poco menos, podemos decir las cosas con calma y sin miedo, sin temor a las consecuencias fiscales que de ello pudieran derivar. Es más, nos produce cierto regusto imaginar que tenemos un problema con hacienda y capacidad y solvencia para arreglarlo. Pagaríamos con espíritu generoso y en una cena de amigos diríamos que esa mañana acabábamos de regularizar nuestra situación, con recargo incluso, para rematar diciendo. ¡cómo son! Pero como somos pobres, o poco menos, no tenemos ese problema. Ni tenemos margen para la irregularidad ni la cadena de corrupción nos ha enganchado. ¡Ni para eso! Quizás vayamos tarde.
            Por lo demás, bien. El fútbol nos ocupa en tareas verdaderamente importantes, como la de los papeles de Rulli, que parecen incautados en la guerra civil y que el Archivo de Salamanca, ese maldito estado, no nos los quiera devolver. Gritamos para quien nos quiera oír que no somos más ridículos porque no queremos, una cuestión de voluntad, de decisión, no de fatalidad. Y, eso sí, aplaudimos al delantero, punta de nuestra usurpadora y decepcionante vanguardia social, aunque nos defraude millones o maltrate a sus novias. Si es gol es gol, ¡oye! ¿cómo no me voy a sentir perseguido?

Pero no hay motivo para el pesimismo. Parece ser que en San Sebastián han identificado a un joven que alquilaba, el muy golfo, su vivienda de protección oficial pagada por todos nosotros, eso dicen. Y alguno más también. La sociedad ha reaccionado y ha emprendido una campaña político mediática contundente. Incluso el alcalde se ha puesto a su cabeza. Han prohibido diferenciar a jóvenes pícaros supervivientes y jóvenes codiciosos y avariciosos, que los hay. Está claro que no soy joven.

viernes, 8 de julio de 2016

EZ BADA

EL DIARIO VASCO 8-7-2016

            Berezkoa zer izanik ez duen joera dugu euskaldunok. Beste guztien ezberdinak garela pentsatzekoa. Hala gara eta arrazoi dugu. Baina ez gara hori gertatzen zaien bakarrak munduan; horretan beste mundutar guztien berdinak gara. Arrazoia galtzen dugu, halakotan mundu guztiak galtzen duen bezala, ezberdinak garela pentsatu eta uste izateko joera hori derrigorrez ezartzen dugunean. Baina ezberdinak gara bai eta geure artean ere, alegia ez gaudela bi euskaldun berdin, eta ez dakit horretaz konturatzen garen. Andaluz baten aurrean bi euskaldun jarriz gero hiru pertsona ezberdin ikusi behar genituzke, ez bi giza multzo ezberdin. Elkarren arteko, euskaldunon arteko, ezberdintasunak aitortzen eta identifikatzen ikasten lan handia daukagu.
            Hauteskunde emaitzen harira irakurtzen ari garen iritziek jartzen dute zer esanik honetaz. Espainiako beste lurraldeetan ez bezala, hemen eta Katalunian Podemos izan da lehen indarra. Batzuei proposamen nazionalisten gainbeheraz hitz egiteko balio die eta nazionalistei euskaldunok gainerako espainiarrekiko dugun ezberdintasunaz, ez espaniartasuna barne, hitz egiteko. Udazkenak ekarriko omen ditu hemen hauetan gauzak bere lekura. Nik neuk inolako lekuz kanpokotasunik ez du ikusten.

            Hauteskunde emaitza hauek kritikatzea oso da zilegi; neuk ere ez ditut gogoko. Emaitzak kritikatzea da bat, garaipena aintzat ez hartzea bestea, eta okerrena, onartezina, podemostarrak kritikatzerakoan erabiltzen ari diren gezur eta ukazioak dira. Ez direla hemen jaioak dioenik, euskalduntasuna lotsagabeki ukatu dienik ezagutzen dut. Kritika politikoa egiteko espainola dela esatea argudioa xenofoboa da nahiz eta tradizio demokratiko handiko alderdietatik egin. 

viernes, 1 de julio de 2016

SU BUZO

EL DIARIO VASCO 1-7-2016

            Aquellas primeras protestas contra una de las incineradoras propuestas tenían aires señoritos, de gente que presumíamos molesta por la proximidad de la instalación más que por la opción política y técnica. Es decir, que nos parecía ver claro que si se les alejaba el trasto dejaría de protestar. No se me han borrado de la memoria aquellos domingos de regatas con las aguas de La Concha haciendo flotar a embarcaciones deportivas, con pancartas de rechazo, tan interesadas, casi, en la denuncia como en la conquista de la bandera por Hondarribia.
            Luego la lucha contra la incineración adquirió otros tintes, se volvió en un cuestionamiento de nuestro modelo socioeconómico y políticas ambientales. La lucha parecía más ruda, más de zapatilla y pancarta de pvc, barbuda y ecologista, pateadora de manifestaciones y concentraciones. Nadie puede negar que hubo quien agitó ese fantasma del miedo que hoy han hecho renacer. Las fachadas y ventanales de las primeras líneas de playa asistieron mudas y relucientes, elegantes y armoniosas, a estos espectáculos. Ni pancartas, ni afiches.
            Hoy, como ayer, pasean visitantes y naturales con miradas de sana envidia a esas fachadas, imaginándose leyendo en la ventana, sorbiendo un martini en el balcón, contemplando la bahía. Hoy, cual anuncio inmobiliario, gotean por esas fachadas banderolas gualdinegras rechazando ese transporte público papanatísticamente llamado metro y sin embargo necesario. Denuncian, ¡oh paradoja! faraonismo.

            Creo que todavía vive aquel mecánico que soñaba con el premio gordo de la quiniela, comprar un piso en la bahía y tender a secar su grasiento buzo en uno de esos balcones.

viernes, 24 de junio de 2016

SOLO VIEJOS

EL DIARIO VASCO 17-6-2016

            Mis primeros recuerdos televisivos son el funeral de Kennedy, el gol de Marcelino, y el Puy de Dome de Jiménez batiendo a Bahamontes. Hoy acompaño a mi nieta viendo capítulos de Heidi. Chavala: imposible hacerte sentir cómo me derrito cuando, apagado el trasto, la nieta pasa su mano por mi cabeza y dice, “abuelito”, en un idioma que todavía desconoce. Me preocupa que me identifique como viejo impedido para las relaciones sociales y aparentemente huraño.
            Ya en la campaña de diciembre me molestó que Pedro, no el de Heidi, si no Sánchez, me mandara una carta agradeciéndome mi lucha pasada, el tesón de mi generación, el compromiso de quienes lo único que él sabría era que figurábamos en algún censo de afiliados de más de seis décadas de edad. Me anunciaba que la nueva generación se hacía con el timón del cambio. No me pareció mal, es ley de vida, pero a su vez lo entendí como una forma indelicada de llamarme viejo, pero viejo de esos mayormente inservibles, de los que ya no quedan. Reparé en el daño que causan los estereotipos.

            Chavala: he recibido carta de una tal Esperanza, diciendo que la suya no es una más de esas peticiones de voto. Me habla de que echa de menos nuestras batallitas de sobremesa, de los valores transmitidos, de que ella continúa, y de lo que va a votar, etcétera. Nunca hubiera imaginado que la juventud transgresora nos hubiera ganado en cursilería y que nos iban a hablar en ese tono. Está bien que piensen que el Skype y el Facebook los hayan inventado ellos solitos, y no que los hayamos aprendido juntos. Está bien, también, que nos llamen mayores, o viejos simplemente, pero de que no somos gilipollas se tienen que enterar, no es una cuestión de edad.

viernes, 17 de junio de 2016

GRATOS

EL DIARIO VASCO 17-6-2016

Si, al igual que con otros asuntos, se hiciera estadística para contabilizar la cantidad de buena gente que hay diseminada en el universo no daría buenos resultados. Enseguida se adueñarían de nosotros aquellas gentes especializadas en las malas lecturas y obtendríamos el número de malas gentes que pueblan el mundo. Acto seguido se empezaría a marcar a esas malas gentes y una vez marcadas… No quiero seguir. Prefiero el cálculo a tanto alzado y muestreos cualificados con el resultado final de que, en contra de lo que parezca, en contra de lo que nos dicen, en contra de lo que nos quieren convencer, gente buena hay en todas partes y es probable que sea mucha, casi seguro que una amplia mayoría. Ocurre que pasa desapercibida.
Circulo y observo los rasgos de los desconocidos, y no tanto, con quienes me cruzo. Me pregunto cuál de sus rasgos me proporcionará pistas sobre su bondad, cuál de sus gestos me llevará a cerciorarme de que es mala gente. Pienso que soportará inquietudes similares a las mías, afectos y desamores como los míos, fracasos y éxitos similares. Me pregunto sobre sus penurias y cuando empiezan a parecerme incalculables me suele invadir la impotencia.

Hoy es general que la impotencia se convierta en rabia, aunque sea esta la peor solución. Y sigo pensando en lo buena gente que somos todos y en lo invisibles que nos hacemos. Busco y doy con gente que en situaciones límite, en la irreversibilidad, no pierden la capacidad de generar un sentimiento noble, de expresar gratitud a pesar de todo, gente que hacen que la vida me guste. Corren malos tiempos. La gratitud se confunde con el sometimiento servil, y el sometimiento con gratitud.

viernes, 10 de junio de 2016

CAZANDO

EL DIARIO VASCO 10-6-2016

Por línea paterna, salvo un par de ocasionales, no conozco cazadores en mi genealogía. Soy de los del tiro por la culata. ¡qué raro! Por línea materna puedo descender de una ingesta de perdiz, tordo, gorrión, trucha, liebre o elemento vivo o prohibido de nuestra fauna que viva en agua, en tierra o vuele. Ejemplo, un tío recaló en San Sebastián en sus últimos días de viaje de novios, en casa de mi tía, en una de esas buhardillas que sobresalen de los tejados de la plaza de la Constitución. Finalizó la luna de miel tendiendo en ese tejado pitas con anzuelos con migas de pan desde la buhardilla. El pasmo de mi tía, amante de cualquier tipo de animal por sucio que este fuera, al descubrirlo fue memorable. Los del pueblo, ella ya no lo era, le seguimos pareciendo entrañables.
Fundación Caza Sostenible y Biodiversidad acaba de manifestar que los cazadores necesitan mejorar una reputación echada a perder y se ha excusado de una acusación no explícitamente manifestada. Para ello, junto a la autoridad, supongo que competente, ha publicado datos de impacto económico de la caza. Como si el dinero… En fin, dicen crear empleo, 1400 aquí y 400 fuera, y todo ese argumentario que contribuye a pensar que todo lo que renta económicamente es bueno y que ante quien paga no queda otra que callarse. Podrá decirse que ante ello y una escopeta en la mano el miedo sea razonable.

Los primeros beneficios que obtuvo mi madre en sus trabajos de modista, contaba ella, los entregó en casa para pagar la renta. Su padre, mi abuelo, y sus hermanos, mis tíos, invirtieron ese dinero en la compra de un perro de caza… Nunca dejó de considerarlos entrañables, es que lo eran. Pero es que tampoco decían que lo hacían por Euskadi (o España)

viernes, 3 de junio de 2016

LOS CULPABLES

EL DIARIO VASCO 3-6-2016

         Eras lo que pensabas, eras lo que no pensabas, un no deberías ser. En torno a ti tomaban cuerpo invisible la suspicacia, la sospecha, el silencio, el frio, la distancia insalvable, el vacío profundo. Les molestaba que fueses. No saludes, por favor, no me conozcas. Te podían llegar, ¡jo que si llegaban!, los timbrazos nocturnos, el odio postal, la humillación física pública, los coros de guerra, la amenaza explícita, tu coche de mierda, la pintura sanguinolenta, la paliza abierta, el fuego, los pedruscos, los cristales rotos, la bala justa. En ese momento, agotados todos los recursos, eras declarado culpable. Erais culpables tú y tu memoria, enemigos ambos de lo nuestro. Por eso.
         Hubo testigos que sobrellevaron esa situación con clase, con elegancia, sin molestar. Una prudente nota, breves, incluso sentidas, palabras. No éramos dados a la histeria, a la lloriconería, a dilucidar nuestros asuntos con escenitas públicas. Gente noble, seria, sin tonterías ni manifestaciones histéricas. Gente que consintió que el sufrimiento se ocultara en la noche, que la noche fuera larga, que la libertad se considerara secundaria. Gente perra que interpretó la realidad como una farsa publicitaria, la denuncia como una orgía electoral.
         Vi la tamborrada del año 93 por televisión. Hablaban de un posible asesinato. En mi recuerdo, la izada de Alderdi Eder se salpica con destellos como de ambulancias y patrullas. El Ayuntamiento iluminado, los tambores tapan algo que ocurría en su trasera y era preciso ocultar. La fiesta nos duró tanto como la noche, como el sufrimiento obligatoriamente oculto. Comparto el dolor del alcalde Odón, otro culpable. Solo hablamos los culpables. No entiendo a quienes se perdonan tanto a sí mismos.

viernes, 27 de mayo de 2016

PALABRAS

EL DIARIO VASCO 27-5-2016


         No se qué adjetivo se le ha de poner a esta primavera para definirla con la máxima exactitud. Cualquiera puede valer, probablemente, salvo política. Nadie se atreverá a relacionarla con la política. Sin embargo florecer florece, consulta por aquí, consulta por allá. Si no fuera porque entre los garantes asoman, risueños, democráticos y dialogantes, aquellos que vieron e hicieron sufrir a quienes no comulgaron con sus dogmas. Si no fuera porque a quienes creyeron en la palabra y se pusieron de pie, les obligaron a arrastrase y a comerse su dignidad de personas. Si no fuera por...  nos debieran dar un poco de tiempo para verificar que el milagro es verdad, que hoy, por orden de la superioridad, son abiertos, dialogantes y respetuosos y lo serán en adelante por convicción ciudadana. Entonces tendríamos oportunidad de decir claro que a lo mejor es un exceso plantear un nuevo estado con objeto de preservar la diferencia identitaria de un vasco riojano y de un riojano riojano. Sin embargo nos retan, y dicen que tomemos la palabra, que nos pronunciemos, o soberanos o independientes. Buscan nuestra palabra.
         Cuenta el escritor Pedro Ugarte cómo al interesarse por el sueño de su madre, ya mayor, esta le contesta que ha dormido como un cesto, para envidia de su tía, mayor todavía que ella. Al señalarle la envidia que producía su bienestar la señora plantó un dardo en la diana y dijo.
         - Pero ella, todavía, encuentra todas las palabras.

         Vive quien encuentra todas las palabras y vive quien persiste en encontrarlas. Todavía no vivimos.

viernes, 20 de mayo de 2016

VIAJE

EL DIARIO VASCO 20-5-2016

El 12 de julio de 1949 se corrió la etapa entre Pau y Luchon del Tour de Francia, que se recordará más por el botellazo propinado, al por infinitos motivos querido, Gino Bartali, inconsciente unos minutos, que por su ganador, el inolvidable Robic. El día 10 acabó la novena etapa en San Sebastián con victoria de Louis Caput y último puesto de Louison Bobet. Aquel solterón, que de chico pisó suelo donostiarra para ver la etapa, era capaz de explicar una subida de Coppi al Galibier como si hubiera estado allí presente, sin embargo el relato del señalado día de la victoria de Caput lo culminaba con un "primer día de mi vida que vi desnuda a una mujer". Cosas y memorias de viajes.

Reconociendo que mi memoria de las, no pocas, lecturas de Hemingway no alcanza profundidad literaria pormenorizada, me atrevería a aventurar que la relación del ínclito con nuestra ciudad es más de francachela que de observación y convivencia, es decir similar a la de mi solterón. Por ello me asombran aquellas afirmaciones de inspiración directa y otras menudencias que conforman el mapa del recorrido del Nobel americano. Me asombran tanto como me enternece la escena  del mustio don José de Arteche solicitándole la cesión gratuita de los derechos de autor para la versión en euskera de El Viejo y El Mar.


Bi y Pan, dice nuestro periódico, son dos periodistas chinos que han recalado en San Sebastián siguiendo los pasos de Hemyngway. No dudo de que seguirán fielmente sus pasos, esos pasos en los que el mismo Hemingway se perdería si volviera, porque nada podría reconocer de aquello. Ni siquiera aquella, lo dudo, nuestra pródiga hospitalidad que hoy maltrata, a pinchos, turistas y demás ralea desde dentro de la barra de nuestras partes viejas.

jueves, 19 de mayo de 2016

¿SIRINGO… QUÉ?

EL DIARIO VASCO 13-5-2016

            Se metió en un avión y en una máquina que le confirmara el diagnóstico. A la enfermera le había bailado una letra y había escrito siningomiélico. Sus consultas al diccionario de griego le sugerían lo peor. Mielia era médula y lo más parecido al resto era sinin, con ípsilon: destructor, devastador. O sea, que la iba a diñar antes de fin de año. Lo pasó muy mal mi amigo. Se confirmó el diagnóstico, padecía una siringomielia. Siringa la diosa convertida en la caña con el que su enamorado fauno, el sátiro dios Pan, hijo de Hermes y de una cabra, construyó la flauta para tocarla a perpetuidad. Pues eso tenía el amigo, un enflautamiento, un enjeringamiento, en la médula, también a perpetuidad, que le impedía sentir el dolor y la temperatura en una de sus extremidades superiores. Una enfermedad rara por infrecuente.

         A los treinta años del diagnóstico las consecuencias del mal empiezan a percibirse más en el nivel físico que en el literario y la base del brazo le baila y salta más que aquella letra de mal recuerdo. Con el brazo como la soga que ata al pollino, ni la soga ni el pollino se enteran, circula entre personal sanitario de todo rango. Le extraña que nadie le pregunta ¿siringo… qué? Y le mosquean las doctas caras que ve, como de haber oído anginas, catarro o agujetas. No entiende por qué nadie duda o no le pregunta qué es eso, cree que todo buen profesional tiene que dudar mucho e informarse más, pero el miedo a evidenciar desconocimientos lógicos obliga por lo visto. Dice que le preguntan a ver dónde le duele. Hay quien, a pesar de la información, insiste, e incluso insinúa que si no le duele para que va por allá. Dice que a la próxima responderá que lo que le empieza doler es el oído.

viernes, 6 de mayo de 2016

TOROS Y BURROS

EL DIARIO VASCO 6-5-2016

                        Parece que nuestro gobierno y alcalde nos quieren consultar, sin obligación de vincularse, sobre la cuestión de los toros en instalaciones municipales de la ciudad. Preferiría que no me consulten, más que nada por aquello de no reñir ni desgraciarme con gente por la que siento aprecio.
         El mundo de la tauromaquia ha dejado una profunda e indeleble huella en la cultura española, sin exceptuar de ella a la vasca, acorde siempre con los tiempos de cada momento. Pero ese reconocimiento puede ser absolutamente incompatible con esa pretensión de salvaguarda cultural y patrimonial que algunos pretenden. Que no me entren por ahí que entonces lo mismo me da que sí que que no. Si la cosa va por España sí, España no, vascos sí, vascos no, yo me desvinculo y voto contra el que más me haga rabiar, que no se anden con tonterías. Si entran en acción con dialécticas nacionales y pseudoprogres aquellos que han defendido los derechos de los animales por encima de los derechos humanos, voto que haya toros todos los días.

         Me pasa como al moro de San Ignacio que, amedrentado, estaba dispuesto a aceptar la virginidad de la virgen antes y después del parto, pero no en el momento del parto. Yo estoy dispuesto a aceptar que los toros hayan vivido a cuerpo de rey para ser sacrificados en el espectáculo. Pero en ningún caso aceptaré que el espectáculo no se basa en la pura violencia. Ni aunque me acusen de haber sido educado en amor a los animales o de ser forofo de Disney que puso voz a los animales, como si las fábulas, los Andersen, los Grimm no hubieran existido, o de accionista de multinacional alimentaria de mascotas. A algunos les salva la prohibición del maltrato a los burros. 

domingo, 1 de mayo de 2016

FRACASADOS

EL DIARIO VASCO 29-4-2016

            Por mucho que la denuesten considero que la transición española de la dictadura a la democracia fue un hecho milagroso por el que deberíamos lamentarnos menos y alegrarnos más. Yo no imaginaba que cuarenta años después observáramos el día día críticándolo con el desparpajo con el que lo hacemos a pesar de las consecuencias que por ello venimos pagando.
         Aunque el mundo empezara a incorporarse al sufragio universal hace siglo y cuarto, y nuestra palmaria falta de tradición democrática e histórica inclinación a los conservadurismos y totalitarismos nos mantuviera a raya hasta hace cuarenta años, nuestra incorporación al voto libre deparaba las más ilusionantes expectativas.
         Desde que tuvimos en nuestras manos el anhelado y casi imposible voto, mira que se han hecho cosas, mira que hemos discutido, perdido oportunidades y logrado conquistas que sólo el habernos habituado a ellas hace que les restemos el valor que tienen y relativizar la flaca memoria que tenemos de los pasados de sometimiento y tortura. Nos ha ido tan bien que nos hemos cansado, por ejemplo, de votar. La rabia por la desconsideración y desprecio absolutos a nuestra opinión y voluntad se nos ha trucado en ira que nos provoca la molestia de que nos consulten. No queremos ni votar.
         No todo es entendible. No se entiende que cuando el desacuerdo y el no pacto, la tozuda integridad de cada cual, han sido el valor más preciado en política, nos sintamos decepcionados por la falta de acuerdo. Sí entiendo el hartazgo, si entiendo que nos sintamos fracasados, en el más escandaloso de los fracasos. No entiendo que ningún ciudadano no político no sintamos la más mínima culpa ni responsabilidad en ese fracaso. Siendo así, es que no hay solución.


viernes, 22 de abril de 2016

ISILDU BALITZ

EL DIARIO VASWCO 22-4-2016

         Non ginen? Zer eguraldi ari zuen? Zein ordutan izan zen? Nola jakin genuen? Zer esan genuen? Nori? Zer erantzun zigun? Zintzo erantzuten saiatuta ere kosta egiten zaigu egia, bere horretan, egia berdaderoa, zein den jakitea. Zaila egiten zaigu geure burua bera ziurtasunez kokatzea iraganeko egun eta uneetan. Ez garela gogoratzen, ezin zehazturik gabiltzala, edo oroimena huts egiten hasia zaigula aitortzea zintzoago litzateke, ziur usteko zenbait erantzun eman baino. Ziurtasun osoko erantzunak susmagarriak dira. Nik uste horrela erantzuten dutenek buruan izan ohi duten galdera non egon behar zuketen dela, ez non zeuden, eta horregatik ematen dituztela erantzun inozo gisakoak.

         Ez zegoen nonbait, gure gizona, 1997ko uztailaren hamabigarreneko larunbat hartan nire, eta askoren, ustez beharko zukeen tokian. Zarauzko plaian omen zeuden eta hango isiltasuna omen du gogoan. Eta idazleari, isiltasuna ez da aterpe esatera ausartu zen idazleari, isiltasun horren koldarkeria, indiferentzia, konplizitatea nola aurpegiratu diguten otu zaio. Eztanda eta orro egiten omen zuen isiltasun hark, errezoak utzitako jendeak otoitz egin omen zuen isilean. Hiltzaileek isiltasuna ulertu gabe hil omen zuten. Irakurle zenbaitek biziki eskertu dio orduko bere isilari, oraindik, hitz dotoreak jartzea.


         Donostiako kaleetan gizon batek, ahots gora, aita gurea errezatzeari ekin zion, gazteleraz. Ez nuen gogoko gizon hura, ez eta errezoa ere. Bitan entzun nion eta eskertu egin nion zorigaitzeko errezoa. Isiltasuna ozeano bilakatu zitzaigun eta han ito gabe atera ginenok gogoratu egiten dugu eta min ematen digu oroitzeak, nire kasuan neure oroimenei burla egiteak adina ia, edo gehiago.   

viernes, 15 de abril de 2016

BUFFETS CARTUJOS

EL DIARIO VASCO 15-4-2016


         Pensando en escribir sobre la pésima impresión que me produce la dirección que lleva el mundo, estaba sumido en el más hondo y oscuro de los pesares. Se me extravió la cartera. el artículo seguía en las mismas y mi prioridad era otra, mi cartera. Me di cuenta de que si no la encontraba mi serenidad de juicio para pronunciarme con nitidez sobre cualquier problemática de la humanidad estaba seriamente afectada. No había cuestión que planteara sin que se interpusiera la dichosa cartera. La encontré, recobré la serenidad y he vuelto a pensar sobre el mundo.

         Lo veo en dirección equivocada, a peor, ahondando injusticias, promoviendo desigualdad, matando de frio, de hambre, de insalubridad, autoagrediéndose impotente, sumiso. A su vez, observo lo que me rodea y todo desborda solidaridad. Los bancos son patronos benefactores de ONGs, las compañías de energías destinan nuestros descuentos promocionales a la filantropía, los hiper dan de comer a medio mundo con nuestros cupones, las iglesias recaudan, de puerta a en puerta hay un pintxopote solidario, un vino de misericordia, una chistorra de generosidad, un evento popular y advocativo. Nunca hemos tenido tanta oportunidad de ayudar y las tragedias gritan, cada vez más fuerte.

         Sigo pensando y separo caridad, dar de lo que no te es imprescindible, y solidaridad, compartir lo que te es necesario. Ante una puerta, una de muchas, me asalta el temor de que alguien, conocido y de mi edad, me intercepte y reproche que no hago nada, por ejemplo, por los sirios. Es la puerta de una sociedad que celebra una comida que recauda fondos para los refugiados; patatas y pollo, nada… por ayudar.

viernes, 8 de abril de 2016

PEDANTERÍAS

EL DIARIO VASCO 8-4-2016

Pescatera, arriero, carbonero, son oficios que en nuestra tradición hemos ligado a personas de no muy buen hablar... bocas negras, lenguas viperinas, expresiones insolentes. Es la única justificación que encuentro para entender cómo un académico de la lengua como Félix de Azua haya podido afirmar públicamente que la alcaldesa de Barcelona debiera estar sirviendo en un puesto de pescado.

Por segunda vez en estas líneas tengo que reconvenir a un escritor que admiro. Recomendar a cualquier persona una profesión que no ejerce porque en la suya no es competente, es un desdoro para esa profesión, en este caso para las personas que sirven en un puesto de pescado. Cualquiera puede ser un incompetente en todo.

Me suele doler mucho, y sufro, cuando gente que respeto mete el zanco tan escandalosamente y no rectifica. La arrogancia es lo más insufrible, y si va aderezada con pedantería uno pierde la fe, se le van despoblando todos sus pedestales.

Ya en el siglo XVI a Montaigne le molestaba que se erosionara la honorabilidad de los maestros porque en las comedias viera a pedantes haciendo de bufón. Trataba de justificarlo por el desacuerdo entre el vulgo y las personas singulares y sobresalientes en juicio y en saber. No entendía que los hombres más refinados fueran aquellos que más desprecio les profesaban. Descubrió con la edad que los más grandes doctos no son los más grandes sabios. La zafiedad pedante es pecado más propio de un, así considerado, digno columnista que de un aceptable literato. ¡No!



viernes, 1 de abril de 2016

DOCTOR

EL DIARIO VASCO 1-4-2016


         Le ataca la melancolía y lo pasa mal. Es un convencido de la bondad de lo público. Si por él fuera privaría de libertad a esos jaleadores de la excelencia de lo privado, gente necesitada de desigualdad para ser. Está en mala edad, en esa edad en que la gente, por sí misma o por sus allegados, empieza a ser asidua de los servicios médicos y de salud, y de otros que mejor no nombrar. En los últimos dos años ha sido un habitual de Osakidetza. Para él, la nación vasca debería representarse mediante Osakidetza o el sistema público de educación, más que por ikurriñas, lauburus y demás aderezos. Servicios de urgencias, enfermería, hospitalizaciones… admite la posibilidad del error, pero le soliviantan las críticas, le parecen gratuitas, ganas.

         En la antesala del especialista observó la cola de pacientes, personas mayores, movilidad condicionada, gente propicia a perderse, a sentirse derrotada ante la informática, enfermera puntualmente dispuesta. Vio llegar, con retraso, al médico. Los pacientes entraron y salieron en un tiempo desproporcionado a su limitada movilidad. Le tocó entrar a él, saludó y, tras breve espera, se sentó, sin invitación, en la silla frente al facultativo. Este le preguntó, imperativo cual antiguo comisario de policía, cómo se llamaba. Miró al ordenador y le prescribió las pautas a seguir. Estaba ya fuera antes de la hora marcada para la entrada.

Tambaleó su mito, Osakidetza, y le volvió esa melancolía sin tratamiento. Pensó que algunas no serán obligaciones médicas de convenio colectivo o profesional, pero él está convencido de que, sin ser gravoso para las arcas públicas, el saludo de un médico, cura, y la amabilidad… hasta puede resucitar, doctor.

domingo, 27 de marzo de 2016

EN CASA

EL DIARIO VASCO 25-3-2016

         Perdonará el lector las dificultades que encuentre en la lectura de esta columna. Están más que justificadas, la he escrito con una mano, que no deja de tener su mérito. Si antes malescribía y malrazonaba con un brazo marchito ahora lo vengo haciendo más manco que Blas de Lezo que, tullidura a tullidura, alcanzó el grado de almirante siendo ya manco, cojo y tuerto ¡qué juventud!

         En esas iban mis preocupaciones del inicio de semana, en buscar mancos ilustres. Los más ofensivos y agresivos me comparan con Napoleón, que de manco nada, pero la postura, ya se sabe. No me desagrada otro Ramon María, Valle Inclán el pendenciero, que tuvo que arrojar su brazo al león para salvar el resto de su persona. Tirando por lo vernáculo, berez behar Villabonakoa, me sale el manco de Villabona, Villabonako besamotza, imbatible pelotari. Opto por Cervantes, es la mejor explicación de una manquedad: “como si hubiera sido en mi mano haber detenido el tiempo, que no pasase por mí, o si mi manquedad hubiera nacido en alguna taberna, sino en la más alta ocasión que vieron los siglos pasados, los presentes, ni esperan ver los venideros”. Es que fue así, en casa, practicando bricolaje con destornillador más grande que un bastón.


         La paisana, obligada a no salir de su casa, declaraba desde Bruselas que no tenía que lamentar la pérdida de ningún amigo, y que su marido, que iba en coche, también estaba bien. Decía que sólo les quedaba mirar la televisión y esperar nuevas noticias. Supongo que, en adelante, no tendremos otra triste manera de afrontar lo que nos sobrevenga. Me consta que hay gente que lo arregla todo desde casa mientras ve la televisión. 

viernes, 18 de marzo de 2016

PSV

EL DIARIO VASCO 18-3-2016

         Compartimos moneda, frontera a la universalización de los derechos, y dictados económicos emanados a saber de qué bunker. Nos tiñe la vergüenza de la geografía como única condición ciudadana. Se diría que las únicas que funcionan son la Europa comisionista financiera y -¡cómo no!- la del fútbol. El fútbol funciona y cohesiona, domina y abusa, viola y violenta, veja y ataca a la condición humana.

         Me revolvían la bilis en nuestras calles esos niñatos cerveceros en dirección a nuestro estadio aclamando a nuestro equipo y pisoteando a nuestra ciudad, ciudadanía y toda convención civilizada. Prepotencia insufrible de que quien paga manda a pesar de que paguen con el dinero de todos. Quiero una Europa que alambre estadios, control de alcoholemia y drogas, rigurosa represora de prepotencias, y con formación cívica financiada en exclusiva con los dineros de los clubes de esa salvajada ilegalizable que llamamos futbol y echa por la borda todo valor cívico acumulando tanto desperdicio humano, tanta miseria moral que rebosa en los estadios.


         Veo a forofos holandeses comportarse igual que los vascos, que los españoles, que los forofos universales, en plaza pública. Vejan y humillan a mujeres indigentes, queman billetes de euros ante su mínima y constreñida humanidad, regalan monedas a condición de que se alejen, les gritan que no crucen la frontera, se ríen con obscenidad, malditos y repugnantes. Me parece mayor ese drama que el espectacular que contemplamos de los refugiados sirios. Hoy, todavía, me sale de las tripas proponer un acuerdo de canje para acoger y asilar en suelo europeo a diez mil sirios por cada energúmeno de esos que, en sobriedad, solo saben decir gol.