viernes, 26 de febrero de 2016

LAGUNTZAK

EL DIARIO VASCO 26-3-2016

         DVk  zioen Foru Aldundiak 1,88 milioi bideratuko dituela euskararen erabilera lagundu eta bultzatzera. Bitxia da, harrigarria, hedabide bakoitzak eman dion oihartzuna. Arriskatuko nintzateke, nire ustez beti ere, zergatik izan daitekeen esatera, baina irakurleari uzten diot galdera, erantzun posibleen aukeran saiatzeko eskatuz.

Euskara sustatzeko proiektu eta jarduerak; lantokietan prestakuntza aldiak euskaraz egitea; euskararen erabilera soziala normalizatzeko tokiko planak; itzulpen praktikak egiteko bekak; toki telebistak; informazio eta komunikazio teknologia bidezko edukiak hedatzeko proiektuak eta euskaraz emititzen duten irratiak izango dira laguntzagai.

         Denetarako iritzirik faltako ez den jakinean, gutxiegi dela, gehiegi dela, euskaraz egunon esateagatik kobratu egin behar ote dugun, euskaraz hitz bat esaten uzteagatik ordaindu egin behar ote dugun... denak entzungo dira. Poztekoa da, ordea, gure erakundeak euskara bultzatu eta diruz laguntzeko borondatea eta aukera izatea. Pozteko behar lukeen bezala diru laguntza guztiekiko ikuspegi kritiko minimo bat duen gizartea ere izatea. Kritikoa idatzi dudanean kontrakoa idatzi behar nuela dioena ezgaitua deklaratzen dut asunto honetan, eta beste askotan, iritzi zuhur eta baliozko bat emateko.

         Deialdia dela eta partaidetza prozesua iragarri du Aldundiak. Aukera baliatu behar luke gizarte gipuzkoarrak post-it bana, edo hamarna, eskuetan duen eta, erremediorik gabe, diru gehiago behar duela dioen herritar multzo baten bileraz gaindiko zerbait ezberdina osatzeko. Beti eta guztia ez ote den ondo gastatu galdera entzundakoan haserretuko ez den eragileak identifikatzeko bederen.


viernes, 19 de febrero de 2016

OLA KOIPE

EL DIARIO VASCO 19-2-2016

         Si ya la pericia geopanorámica –exhibida tras la celebración del evento, nunca antes- mostrada por miles de ciudadanos al hilo de la ceremonia inaugural me causó un pasmo del que no me he sobrepuesto, ahora me desbordan los hidrólogos, oceanógrafos y otros gramáticos pardos que actúan como clientes o servidores en el tercer sector de todo el territorio. ¡Cuánto conocimiento desaprovechado y talento desviado! Estoy seguro de que si el milagro de los peces se llegara a producir en el tramo de río entre Martutene y la desembocadura del Urumea, por muy milagro que fuera, la explicación no sería la de un hecho milagroso sino la que nos proporcionarían ese número incontable de enterados y todólogos que pueblan nuestra bendita tierra. Donde hay ciencia y conocimiento que se borren los milagros.


         Me asombró mi jefe, por algo es jefe, cuando una visita nos explicó cómo los primeros puentes del Urumea, en sucesión histórica, no sufrieron daños en el temporal y cómo resultaron perjudicados el cuarto y el quinto. Siendo así las cosas mi jefe lo entendió a la primera y, para más inri, explicó el fenómeno de tal forma que yo, inmerso en declinaciones, palabros y verbos, soy incapaz de reproducir. Saber y naturalidad. Le comenté el asombro a mi hermano que también se explayó en lo del canal del cauce que impulsa al agua que empuja desmedida… mientras preguntaba si yo era bobo, a ver si no había oído nunca hablar de la ola de Koipe, ola nunca comentada en este periódico pero muy citada en círculos en los que mandar a alguien a freír espárragos es decirle que vaya a surfear a la ola de Koipe. Compro tabla... filológica, y queda ésta para la historia ya que Koipe se fue.

viernes, 12 de febrero de 2016

RESPETOS

EL DIARIO VASCO 12-2-2016

         Florena había venido del caserío a servir y ya hacia tiempo que se había hecho de aquí, de la pequeña ciudad. Las tardes de los domingos paseaba por la Concha, acicalada y arreglada, con la desenvoltura de cualquier natural. Aquel domingo se sintió que la veían atractiva como nunca, todos clavaban la mirada en ella, pensó que esa tarde lucía particularmente guapa. Al mucho rato, se dio cuenta de que llevaba una media caída hasta la pantorrilla que no era precisamente su punto más atractivo. Desde entonces vive con la convicción de que si alguien se vuelve para mirar el traje que uno lleva, lo hace porque no va bien vestido.

         En la conocida como ceremonia de los Goya – ¡como que no oí yo misas con menos sermón en tiempos!- se presentaron tres de nuestros más osados representantes políticos con proyección, Sánchez, Iglesias y Rivera, vestidos cada cual para la ocasión.  Nos volvimos todos para mirarles. Sánchez iba trajeado, camisa limpia y pecho descubierto, Rivera e Iglesias iban empajaritados ¿me explico? Dentro de tanta normalidad extrañaba la etiqueta de aquel que fue remangado a la cita con el monarca.


         Sn ánimo de contribuir a un linchamiento carca y rancio, busqué una explicación bondadosa de la etiqueta. La única que se me ocurrió, y que después corroboré, fue la del respeto al cine, en cualquier caso más que al jefe del estado. Esta explicación puede resultar convincente para quienes piensan que la única manera de expresar respeto y pleitesía son el chaqué, la levita y la pajarita, argumento asombroso e inesperado en quienes propugnan un vuelco radical y decepcionante para quienes imaginábamos expectativas. 

viernes, 5 de febrero de 2016

FUENTES

EL DIARIO VASCO 5-2-2016

         Atraído por una propuesta de 2016 paseo por el pasillo central de los jardines de Ondarreta.  Al fondo, el costado de la estatua de la reina Maria Cristina, una más, obliga al paseante cotidiano a hacerlo como en una rotonda. Ante ese fondo brotan, como trasmochados tamarindos enanos, vegetación rodeando un pilón, las fuentes que la artista Maider López ha plantado en el suelo tras rescatarlas de los almacenes municipales. Es curioso el paisaje, tan curioso como desconcertante. Que en mitad de trayecto broten e irrumpan elementos de hierro colado, aparentemente antiguos, o antiguos para gran parte de la población, reproducción en verde incomprensible para los que bebimos de bocas de faunos de hierro que no dejaban de manar, sí que provoca.


         Son elementos que en la ciudad decidimos reponerlos por distintas razones, en su mayoría por reformas urbanísticas. Su contemplación despierta todo tipo de sentimientos: evocación, nostalgia, bondad, nobleza, gusto, amor, cursilería, poder, igualdad... todo lo que el lector quiera. A mí me produjo turbación. Quizás porque ya no vi allí a aquella viajera de cercanías, procedencia y origen desconocidos, que lavaba su fiambrera en la fuente, o a aquel indigente que se aseaba y afeitaba en la fuente, ni a su cuadrilla. La fuente estaba allá, ni la viajera, ni el indigente, ni las personas a las que los espacios contemporáneos les impiden descansar, tomar aliento o asentarse, estaban. Aquellos vecinos, otrora molestos y ofendidos, acudirán a aquella su fuente tan bonita, retirada de su vista, hoy tan bien cuidada y guardada por la ciudad.  Recordarán su belleza. Se confundirán. 

lunes, 1 de febrero de 2016

PARTICIPANTES

E DIARIO VASCO 29-01-2016

          Pienso, y me duele, que si determinados ciudadanos de Cataluña que tienen propensión a vernos como picapedreros, hacheros, levantadores de cargas y cortadores de leña, tuvieran la responsabilidad de comisariar una ceremonia inaugural de un evento catalán de intención internacional, nunca se les ocurriría echar mano de una identidad ruralizada, ni de legendarias raíces decimonónico-románticas. Me empieza a resultar molesto que caigan en esa tentación. No sé si es consecuencia de que a los vascos nos ven así o piensan, y espero que así sea, que nos gusta que nos vean así.

          Mal me empezó la ceremonia inaugural y no me lo mejoró su desarrollo. Nos ha dejado sumidos en un caos de opiniones que, salvo excepciones dignas de atento estudio, no dejan de coincidir en su decepción y desilusión. ¿ciudadanía conservadora? ¿sabemos hacer algo más que golpear el tambor a ritmo? ¿tendremos oportunidad de redimirnos? Seguro que sí.

          Destacan los responsables que ahí queda eso, la participación de la gente. No deja de ser un balance inquietante. Creo que hay una tendencia excesiva a evaluar determinados resultados con el único criterio del número de participantes, en política, en cultura, en todo. Que demasiadas veces se ocultan los criterios evaluatorios con el argumento de que se trata de que la gente pariticipe, conviva.


          No tengo la menor duda de que la gente participó el día pasado, pero alguien me debería contar de que trata eso de participar, porque me temo que aquello fue una metáfora de la participación, de lo que hasta ahora, todos y en todo, nos hemos contado que es la participación. Y no.